Soy Robinson Torres, papá de cuatro varones y una gatita llamada Nía. Felipe, el mayor de mis hijos, estudia Psicología; los otros tres aún no superan los doce años, pero cada uno ya tiene su propia personalidad bien marcada. León es un apasionado del fútbol, Julián ama la lectura y toca el violín, y Facundo, con solo 8 años, se apasiona con el fútbol y su creatividad. Con ellos compartimos el amor incondicional de Patricia, su mamá (mi chinita), quien enfrentó con valentía un cáncer de mamas triple negativo, sin dejar de ser la cariñosa, fuerte y disciplinada madre que es.

Gracias a Dios, Paty ganó esa dura batalla. Ella no solo es mi mujer, sino también mi compañera de vida. Juntos hemos compartido momentos dulces y amargos, pero siempre entre risas.

Fui papá a los 17 años, lo que me llevó a comenzar a trabajar antes de salir del colegio. Al entrar a la universidad en el 2000, estudié Construcción en la USACH y luego Arquitectura en la UTEM, siempre combinando estudio y trabajo.

A lo largo de los años, he hecho de todo: trabajé como mueblista en el taller de mi papá, fui operario en PEPSI, junior en un estudio jurídico, emprendí con un correo privado que no prosperó, diseñé interiores y, junto a Patricia, abrimos una tienda de muebles de diseño y ropa reciclada en Barrio Italia, cuando aún no era el icónico lugar que es hoy. Aunque tuvimos visión, no fue suficiente. Aprendí de cada experiencia, cada caída y cada reinvención.

Más adelante, fundé junto a un compañero de carrera "Proyecto Zeis", una oficina de arquitectura y construcción donde gane experiencia en el área industrial, comercial y residencial. Fueron años de dedicación total, noches sin dormir y mucho café. La arquitectura es hermosa, pero demanda una pasión que desafía los límites. Mientras tanto, mi familia crecía como la espuma y yo agradecía a Dios cada día la oportunidad de seguir avanzando, incluso cuando el marcador estaba en contra.
Tras el cáncer de Paty, tuvimos que empezar de nuevo, con menos recursos, pero con más experiencia y fortaleza.

En ese camino descubrí el mundo de la inversión inmobiliaria y entendí que las mayores barreras para invertir no son financieras, sino emocionales: miedo al riesgo, desinformación y creencias limitantes sobre este mercado.

Invertir en propiedades no es solo comprar activos y calcular el CAPRATE. Es comprender un sistema financiero complejo donde confluyen variables tributarias, legales, de planificación urbana, incluso políticas. Pero lo más importante es que cada inversión debe adaptarse a ti: a tu perfil, objetivos y realidad.

Así nació PLUSVALÍZATE, un sistema pensado para personas comunes que, con una buena asesoría y una estrategia clara, pueden construir un patrimonio sólido y transformar su futuro.

Trabajé como corredor de propiedades, hice todos los cursos posibles y hasta participé en la creación de una asociación gremial. Me dediqué a la compra, venta y arriendo residencial, comercial e industrial, además de identificar terrenos para desarrollos inmobiliarios. Luego, encontré una oportunidad como bróker inmobiliario freelance y lo estudié a fondo. Descubrí una actividad que no solo me permitía llevar pan a mi mesa, sino también impactar positivamente en la vida de otras personas.

Gracias a mi experiencia en arquitectura, pude reinterpretar el proceso de inversión inmobiliaria y diseñar una estrategia clara y efectiva para ayudar a otros a alcanzar sus metas financieras.
Validé este sistema, seguí perfeccionándolo y me capacité en Gestión de Inversiones Inmobiliarias en la Universidad Finis Terrae, además de mantenerme estudiando de manera autodidacta permanentemente.
Este sistema está diseñado para personas comunes que, con una buena asesoría, pueden lograr en el tiempo que les tomaría pagar un departamento, construir un patrimonio que les permita decidir libremente sobre su futuro.

Plusvalizate es un proyecto que me llena de orgullo porque representa todo lo que siempre soñé: un concepto innovador, con una visión clara de transformar vidas.

Hoy, con más de 7 años de experiencia en inversión inmobiliaria, mi misión es ayudarte a tomar decisiones informadas, diseñar estrategias personalizadas y aprovechar cada oportunidad que el mercado ofrece. Ya sea a través de mentorías, consultorías o gestión de inversiones, estoy aquí para guiarte.

Cada día me levanto agradecido, sabiendo que lo que hacemos en PLUSVALÍZATE impacta positivamente en la vida de las personas.

Gracias por tomarte el tiempo de conocerme. ¡Estoy aquí para ayudarte en lo que necesites!

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